Según la leyenda Roma fue fundada en el año 753 a.C. por los gemelos Rómulo y Remo, pero todo parece indicar que su origen es anterior. Fue un pequeño poblado de sabinos y latinos en el centro de la península itálica, donde habitaban también los ligures, los umbros, los samnitas, bajo la hegemonía de los etruscos.
El pequeño poblado creció y unificó bajo una misma ley, una misma lengua y una misma arquitectura a todos los pueblos ribereños del Mediterráneo y de la costa atlántica occidental de Europa. Edificó un Imperio de más de seis millones de kilómetros cuadrados que, en su mejor momento, incluía todas las tierras entre el Atlántico y el Golfo Pérsico, desde los tórridos desiertos africanos hasta las frías y brumosas colinas del sur de Escocia.
La cronología de la civilización romana abarca los siguientes períodos:
Monarquía legendaria (753 a.C.-510 a.C.): marcada por el dominio y la influencia de los etruscos.
República (509 a.C.-31 a.C.): comenzó la gran expansión romana por el Mediterráneo, con hitos como las Guerras Púnicas.
Imperio (31 a.C.-476 d.C.): la figura del Emperador se superpone a todo el entramado político de la República. La decadencia romana empezó con la crisis del siglo III y terminó con la división del Imperio y la conquista por parte de los pueblos bárbaros de la parte occidental.
Alto Imperio (27 a.C-193 d.C.).
Bajo Imperio (193 -476).